Desde 2013 habita el antiguo Cine Lux, localizado en el Centro Histórico de la capital guatemalteca. El inmueble fue construido en 1936, caracterizándose por un estilo art decó. Dentro de la edificación, las actividades del Centro Cultural de España ofrecen intercambios participativos abordando diálogos contemporáneos. La plataforma que se abre al acompañamiento y visibilización de procesos creativos e innovadores para fomentar dinámicas culturales incluyentes.

En el CCE, ‘El Árbol del Mundo’ emerge como un poderoso símbolo, presentando diversos artistas cuyas obras profundizan en temas de ecología, memoria, migración e identidad. Ellos tejen una narrativa que atraviesa crisis medioambientales, historias silenciadas y resistencias culturales.
Inspirada por el desastre ecológico del Lago Atitlán, la intervención de Verónica Riedel, que abarca varias locaciones del CCE, funciona como un recuerdo conmovedor de nuestras responsabilidades medioambientales.
Cuestionando las inequidades de los movimientos transfronterizos, Jorge de León complejiza esta narrativa: el movimiento transnacional del arte, respaldado por permisos y seguros, difiere de los peligrosos viajes de innumerables personas sin garantías.
La recuperación del conocimiento tradicional cotidiano silenciado por el colonialismo impulsa el trabajo de Christian Salablanca, fortaleciendo las raíces de la identidad cultural que ha sido históricamente marginada.
Por último, Jaanus Samma examina el mito estonio y la memoria histórica, reflexionando sobre la construcción de la identidad nacional y el papel del artista en la intersección entre la guerra, la política y la cultura popular.
En el CCE, estos artistas cultivan ‘El Árbol del Mundo’ como un símbolo vibrante de resiliencia ecológica, cultural y política, presentando propuestas artísticas que captan la atención e inspiran a la acción.